Discurso- Ciclos bélicos de odio inspirado en el anime Naruto Shippuden

 Esto es un discurso, con un desarrollo como tal.

Somos de la misma raza, después de todo, en este mundo destinado a un ciclo incesante de odio, tu y yo buscamos lo mismo, la ingenua paz, nuestra naturaleza busca el conflicto, no importa la razones, así de débil es la humanidad que cae frente al odio de la guerra.

Se cree que en los conflictos se lucha por lo bueno o por la malo, un enfrentamiento entre el héroe y un supuesto villano, entre el victimario y la victima, las preguntas que nunca serán resueltas son lanzadas al aire en un desenfrenado y caótico mundo acostumbrado al odio, no es sino mas que la guerra que ya hace parte de nosotros y nos da la bienvenida con su cínica sonrisa.

Buscamos la paz, con la angustia propia del deseo, se convierte en una necesidad imperiosa, y casi agobiante, que nos recuerda nuestra condición humana, atada una violencia inconsciente.

Una vez tuve la oportunidad de escuchar acerca de la industria de Marvel, que era absurda, los héroes necesitaban de un villano para poder coexistir, sin villano, no hay héroe, ese error no lo cometieron en la obra de Los Miserables, dos hombres ilustrados, que sin ninguna etiqueta de por medio luchaban por sus ideales que al final eran contrapuestos. Esto lo propone el anime Naruto Shippuden, un supuesto villano,Nagato,victima de la guerra, desea la paz, sabe que en medio de este mundo es imposible conseguirlo por la mera voluntad de las masas, la humanidad esta destinada a lastimar a la humanidad, esto se convierte en una cadena eterna de odio. La violencia es inevitable.
En su mente, sabe que lo mas cercano a la paz es el control.

“La única forma de controlar a la humanidad es por medio del miedo” Tomas Hobbes

Una sociedad con miedo es manipulable y obediente, esto promete ciclos de paz, de permanencia no, estamos frente a los hombres, y ellos son olvidadizos.

Esto frente a nosotros es llamado una cadena de odio fundamentada en una violencia sin fin, en donde el dolor y la venganza protagonizan todo el panorama, con el hecho de que todos somos victimas y estamos encerradas en ese ciclo, se reduce a un escenario en donde unos violentan a otros y estos cegados corresponden al hecho, y así.

Pain, desde un punto de vista lejano es todo un villano, destruye la aldea del protagonista y se encarga de asesinar a todo aquel que esta a su paso, sin embargo, la misma obra nos relata que es la sociedad quien se encarga de construir sus propios delincuentes, su historia se relata en el horror de la guerra cuando sus padres fueron asesinados y quedando solo en el mundo entiende la naturaleza humana, en donde sobrevive el mas fuerte, no es sino para que posterior a eso, en un intento por construir la paz con dialogo, su mejor amigo corriera la misma suerte, fue en ese momento que Pain entendió que el mundo era así, cruel y que no había otra posibilidad.

En un contexto bélico, en donde los malos son los que empeñan un arma, desconocemos nuestros propios reflejos, así como muchos han sido afectado por el conflicto armado, no se requiere una formalidad para entender que aquello era y es guerra, y que todos conversan su propio relato, su propia historia, su propia razón para ser “el villano del cuento”.

Frente a esto, es cuando se presenta una escena en donde el villano somete al héroe y lo sorprende con una pregunta: Entonces, ¿Tu que harías con todo el odio del mundo?

Es ahí cuando protagonista, el gran héroe de héroes, conserva silencio, y le concede la razón al villano, es cierto, la paz no existe, es solo una utopía que nos ilusiona, y que proyecta una lucha inconsciente.

Somos responsables de nuestra propia maldad, así como somos responsables de nuestra propia conducta, y nuestra sociedad, nuestro deber no se limita a la destrucción sino a un compromiso personal, ideal, en donde la aspereza no opaque la esperanza, la empatía, por una extinción de etiquetas inútiles acerca de lo bueno y malo que ciegan lo que hoy bajo nuestros pies esta.